Para mantenerte seguro mientras navegas por la Red hay que evitar ciertas acciones, y estar seguro de hacer y seguir algunos consejos. A continuación todo lo que debes seguir para no arrepentirte de tus acciones online.

Comprueba la seguridad de tu conexión a Internet

Tu viaje por Internet comienza al instalar el router: para evitar que personas ajenas a ti accedan a tu conexión privada, es necesario utilizar un método de cifrado y una clave secreta, además de reforzar la seguridad, evitando los ciberataques y protegiendo los servicios que utilizamos, tales como páginas Web o correo electrónico.

Además, desconfía de Redes Wifi públicas, ya que se pueden utilizar de forma maliciosa, para robar información privada del dispositivo que se conecta a la misma. Si se trata de un establecimiento, siempre pregunta al dueño o a sus empleados.

Contraseñas seguras

Aunque no existe una "contraseña perfecta", es recomendable que tenga, por lo menos, ocho caracteres, combinando letras, números, mayúsculas, minúsculas y diferentes símbolos, como guiones o puntos. Evita utilizar la misma contraseña para diferentes cuentas, ya que así podrás minimizar el impacto en caso de que alguien consiga robarte una. Los sistemas que utilizan los piratas informáticos para descifrarlas son cada vez más sofisticados, pero una contraseña larga y compleja dificulta su trabajo.

Protege tus dispositivos

Hay diferentes formas de proteger las herramientas que contienen datos privados, como por ejemplo tu smartphone: una de estas es establecer contraseñas para dificultar el acceso a la información almacenada. Una serie de números pueden dificultar el robo de contenidos, en caso de robo o pérdida del dispositivo, aunque lo más recomendable es bloquearlo por completo y/o borrar todo lo que  tengamos guardado a través de aplicaciones específicas.

Lee siempre las políticas de privacidad antes de instalar una nueva aplicación: esta es una práctica que muy pocos hacemos, y es muy importante saber a qué podrá acceder dicha aplicación, qué información puede conocer, etc. Además, mantén todo actualizado, tanto dispositivos como aplicaciones.

Ten cuidado con las compras

El comercio electrónico permite la adquisición de productos de cualquier parte del mundo sin salir de casa, gracias a las oportunidades que ofrece Internet, pero hay que ser prudente con los lugares en donde decides introducir tus datos bancarios. En primer lugar, comprueba que la página sea fiable, y controla las operaciones y trámites bancarios, no los realices a través de Wifi públicas, gestiona directamente todo desde la Web del banco.

Piensa dos veces antes de publicar algo

La autorresponsabilidad es un concepto muy importante a tener en cuenta: cuando publicas algo en Internet, queda expuesto a millones de personas, por lo que es imposible retirar esta información de la circulación, aunque en la página que lo hayas hecho exista el botón "Borrar publicación". Establécete límites y controla los contenidos que transmites, fotografías, información personal, datos bancarios...

Supervisa la actividad de los menores

En la mayoría de los casos, los más pequeños no son conscientes de los riesgos que supone el navegar por Internet: son más propensos a sufrir ciberataques. Hay que enseñarles a filtrar la información que reciben y proporcionan, a través de Redes Sociales, Blogs o cualquier tipo de plataforma. También es recomendable restringir el acceso a sitios con contenidos inapropiados y bloquear las imágenes de los niños bloqueando el acceso a las cámaras de los dispositivos.